¿Está medido?
Estupendo, podemos empezar a trabajar.
No está medido
Pues se lo medimos. La cinta, el flexómetro y el medidor láser son nuestros aliados. Nuestro equipo le mide el solar y se lo representa gráficamente. Valoraremos si se precisa la concurrencia de algún topógrafo.
Hay que hacer un levantamiento. Manos a la obra, nuestro equipo lo levanta. Tendremos en consideración si es para derribar, si es para habilitar, reformar, ampliar, reparar, rehabilitar etcétera.
Tenemos un levantamiento, un solar medido y dibujado o una parcela también dibujada.
Despejando estas tres incógnitas conjuntamente con el proyectista podemos empezar a esbozar.
A las órdenes del autor del proyecto desarrollaremos los planos de este documento, a saber:
Si bien forma parte del Proyecto de Ejecución, le dedicamos una atención especial desde dos opciones:
Delineantes | Estudio de delineación: